Entrevista a: Federico Bruno

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Uno de los referentes de Bruno es Hicham El Guerrouj a quien tiene tatuado en su muñeca junto a los anillos olímpicos y 3:26.00, el tiempo que el marroquí hizo en julio de 1998 y fue la plusmarca mundial de 1.500 metros hasta que el 16 de febrero de 2019 el etíope Samuel Tefera lo superó. Lo cierto es que El Guerrouj es un ejemplo de garra y perseverancia. En los Juegos Olímpicos de Atlanta 1996 abandonó al sufrir una caída en la final. Cuatro años más tarde, en Sydney 2000, llegó de nuevo como favorito pero se vio sorprendido en la recta final por el keniano Noah Ngeny. La gloria olímpica tendría que esperar hasta Atenas 2004, cuando se colgó el oro en una apretadísima carrera. Cuando se lo tatuó al marroquí, Federico Bruno no sabía lo que viviría en el maratón de Río 2016 donde corrió desde el kilómetro 30 con un tirón en los músculos isquiotibiales y a partir del kilómetro 37 tuvo calambres permanentes. Llegó de costado a la meta, sujetando la bandera Argentina y logrando un tiempo de 2:40:05, quedando en la 137° posición. Dio todo hasta llegar porque no se le cruzaba por la mente abandonar en un Juego Olímpico. Ahora con 27 años y toda esa experiencia acumulada aspira a clasificar a Tokio 2020 en la prueba que es su especialidad: los 1.500 metros llanos.

Así lo rememora: “Mi objetivo era estar en los Juegos Olímpicos y sigo considerando que fue una buena decisión, no me arrepiento porque participé en los Juegos. Debuté en maratón con el mínimo que pedía la CADA en ese momento y fui parte de un Juego Olímpico. Esa llegada no fue el mejor recuerdo. Yo quería llegar como sea porque era mi primer juego olímpico y no quería abandonar. Aunque para muchos sea ejemplo de esfuerzo, de sacrificio, de no abandonar, de dar batalla hasta el final… yo hubiera preferido llegar corriendo como un atleta normal”.

– ¿Te sirvió la preparación del maratón cuando volviste a la pista?
– El maratón me fortaleció en la pista. Lo que no te mata te fortalece. He mejorado mucho la capacidad aeróbica. Mejoré mucho los fondos, las tiradas largas. En la velocidad estaba más fuerte porque el correr dos horas te da una fuerza increíble cuando activas las fibras rápidas. En 2017 hacía pasadas fuertísimas, trabajé la velocidad como nunca en mi vida. También es cuestión de mentalizarse porque si vos pensas que después del maratón vas a quedar lento, vas a quedar lento porque le mandas ese mensaje al cerebro. Pero al volver a los 1500 yo mejoré muchísimo.

Grand Prix Sudamericano 2021
El viernes 26 de marzo pasado, en en el primer día de los Grand Prix Sudamericanos en Argentina, en la pista sintética del CEF N° 3 en la ciudad entrerriana de Concepción del Uruguay se desarrolló la carrera más importante de la historia del atletismo argentino sobre los 1.500 metros: Ocho atletas de nuestro país estuvieron por debajo de los 3 minutos 50 segundos y Federico Bruno volvió a batir el récord nacional. Marcó 3:38.23, batiendo los 3:38.35 que mantenía desde el 8 de julio de 2015 en Barcelona. El segundo puesto fue para el brasileño Guilherme Kurtz con 3:40.78 y completó el podio el santafesino José Zabala con 3:40.87. Quedó 4° el marplatense Diego Lacamoire 3:42.70, 5° el merlense Fabián Manrique con 3:43.10, 6° el colombiano Carlos San Martín con 3:46.68, 7° el esquelense Joaquín Arbe con 3:46.99, 8° el tucumano Leonel Pérez Lazarte con 3:48.56, 9° el cordobes Juan Dutary con 3:48.70 y 10° el juvenil entrerriano Dylan Van der Hock con 3:48.71.

Así lo vivió Bruno: “Ese día quedó demostrado el nivel de Argentina. Sacando mi récord nacional tenes a José Zabala con 21 años que tiene 3:40, a Diego Lacamoire con 3:41, cuarto a Fabián Manrique con 3:43 y después vienen muchos juveniles como Dylan Van Der Hock con 3.48, casi mínima para el Mundial de Nairobi. El medio fondo argentino ha crecido mucho. El 1.500 en especial, porque en 800 y en 3.000 no se han visto grandes marcas todavía. El estar todos motivados, en un nivel similar de 3:38 a 3:43 hace que el trencito se mantenga y yo no quede tan colgado”.

Milla en Concordia
El miércoles 31 de marzo se realizó una prueba especial de la milla durante un torneo reducido en la pista sintética de Concordia. Varios de los mejores mediofondistas argentinos, que venían de producir cinco días antes la carrera de 1.500 metros llanos más espectacular de la historia, protagonizaron este nuevo suceso. La carrera la ganó Federico Bruno y se convirtió en el primer atleta argentino en la historia en correr la milla por debajo de los 4 minutos. Registró 3:59.27, dejando atrás su propio récord nacional, que era de 4:00.31 y que había logrado el 30 de mayo de 2015 en la Prefontaine Classic.

Así lo cuenta Bruno: “El que maneja el fotofinish en Concordia se iba de vacaciones en Semana Santa y nos dijo que teníamos que hacer la prueba el miércoles. Así que modifiqué los entrenamientos porque yo venía de correr el viernes en el Grand Prix y corrimos ese día como si fuese un estímulo. Se organizó el torneo con otras pruebas para que sea oficial. Había hablado Leo Malgor para que la hagamos y me pareció bien ya que estábamos varios chicos entrenando en Concordia, entre ellos Diego Lacamoire. En realidad yo prefería hacer un 2.000 porque había quedado muy cerca del récord, ya que la milla y los 1.500 ya era mío el récord y los 2.000 todavía es récord de Javier Carriqueo y era un buen estímulo sumar ese récord también. Pero ya va a salir”.

101° Nacional de Mayores
El 9 de abril en la primera jornada del 101° Campeonato Nacional de Mayores en la pista sintética del CEF N° 3 de Concepción del Uruguay.la prueba de los 1500 metros de varones se llevó todas las miradas y allí el concordiense Federico Bruno volvió a batir su propio récord en la distancia con 3:38.21, seguido por el marplatense Diego Lacamoire con 3:41.98 y completó el podio el santafesino José Zabala con 3:45.55.

“Estoy muy contento porque mejoré el récord nacional en uno de los eventos más importantes del trayecto a Tokio y además porque sumé 1230 puntos y me ubica entre los 45 del ranking de la World Athletics para los Juegos Olímpicos y todavía me queda el Campeonato Sudamericano. Después del Grand Prix, Diego Lacamoire y varios chicos vinieron a mi casa a entrenar dos semanas previo al Nacional. Ahí les dije voy a poner una liebre y voy a pasar en 1:56 y si aguanto voy a correr 3:36 y sino haré otra vez 3:38. Por eso no festejé al llegar, porque tenía en la cabeza dar 3:36. Pero después con la cabeza fría pienso en el clima que no favoreció, en la lluvia, en la pista mojada y no estuvo nada mal. También la liebre corriendo hasta los 800 en los 1500 metros queda corta. Lo ideal sería llegar hasta el 1.000/1.100, pero ¿quién pasa los 1.000 a 2:25 en Argentina?”, expresó Bruno.

La importancia de las “liebres”
“Yo suelo poner liebres. Desde que tengo 18 años pongo una o dos liebres para correr fuerte. Con 18 años yo corría en 3:40, entonces tenía que poner a alguien hasta los 800, 900 metros que corra fuerte y me marque el ritmo. En Argentina falta esa costumbre. Si yo no ponía las liebres en las competencias de este año quizás no salían las marcas que nos salieron a todos. Y el nivel lo tienen porque lo han demostrado. Tienen que organizarse entre 5 o 6 del mismo nivel y poner siempre en las carreras que hagan, como lo hacen los europeos”.

Félix Sánchez
El metropolitano José “Félix” Sánchez, compañero de equipo en FCMax, fue liebre en pista de Federico Bruno en los 1.500 metros llanos en el Grand Prix Sudamericano y en el Nacional de Mayores en Concepción del Uruguay como también en la Milla realizada en Concordia. En las tres competencias Bruno mejoró su marca siendo récord nacional de 1500 metros y de la milla. Tras esas competencias, Sánchez viajó a Santa Rosa para ser liebre de Daiana Ocampo en su búsqueda de la marca mínima en maratón para Tokio 2020. Sánchez la acompañó durante todo el circuito bajo la tormenta que azotó a La Pampa y llegó 10° en la clasificación general con un tiempo de 2:31.35.

“Félix es impresionante. Tuvo la habilidad de tirar en 1:56 en 800 y después a la semana siguiente hacer 2:30 en maratón. Tuvo un buen gesto acercándose para ser liebre por estar lesionado y se agradece” expresó Bruno.

Dylan Van Der Hock
“A Dylan lo conozco desde que tiene 13 años. Estaba siempre con su padre, Marcelo, que siempre corría. Y nosotros salíamos a hacer los fondos y venía Dylan, flaquito, chiquito. En Concordia hacíamos 15 kilómetros pero por ruta y llegábamos a la mitad y había que pegar la vuelta y todos decíamos ahora cómo vuelve el chiquilín. Y no le quedaba otra que seguirnos.Es un talento más de tantos que salieron de Entre Ríos: Antonio Silio, Luis Migueles, Toribio Gutiérrez, Martín Méndez y tantos más. Para mí es porque tenemos la escuela de correr sin medirnos (risas)”, resumió Federico.

El atletismo para los chicos
“A uno de mis primeros entrenadores en pista cuando íbamos al Cenard a competir yo le preguntaba en qué tiempo salía y siempre me decía “Vos mi hijo salí fuerte, aguantá y llegá fuerte”. No me daba un parámetro. Ahora los entrenadores a los chicos le ponen parámetros, tiempos. Yo a los chicos de 13 o 14 años les digo “Corre lo más fuerte que puedas. No tenés que especular. Salí y corré”. ¿Si sos cadete o pre-infantil vas a especular por una medalla? ¿qué valor va a tener esa medalla después? Tienen que salir, correr y divertirse”.

Maratón de Reyes
“En Concordia es un ícono. Más que una carrera es un festival. Ya van 43 ediciones. Es algo muy presente para los concordienses. Yo siempre digo que vos podes ser campeón olímpico pero si no ganaste la Maratón de Reyes para los concordienses no sos nadie (risas). Es como que ahí demostrás la calidad de atleta que sos. Han venido siempre buenos corredores. Antes venían muy buenos brasileños porque les convenía por el cambio. Siempre tuvo muy buen nivel”.

Pretemporada en Cachi
“Vine 20 días a Cachi preparándome para el Sudamericano. Estoy en un nivel fuerte, acá voy a entrenar para sostener o mejorar los tiempos del Nacional. Si lo sostengo ya es bueno y si lo mejoro sería excelente. Creo que 3:36 hasta incluso 3:35 puedo correr bien. Cuesta correr solo. Más allá de que tenga alguien dos vueltas, después esos 700 metros solo cuesta. Quiero correr fuerte, debajo de 3:38, el puesto no me importa, sino ganar la mayor cantidad de puntos necesarios para estar en los Juegos Olímpicos. Haciendo un buen papel en el Sudamericano, batiendo el récord de los torneos sudamericanos si es posible, voy a estar asegurando la clasificación a Tokio”.

Gira por Europa
“Está planificada una gira de cinco semanas por Europa después del Sudamericano. Parando en Madrid y compitiendo en Bélgica, Francia, Portugal. Ahí la idea es hacer una o dos competencias más para buscar la marca mínima para los Juegos que es 3:35. Si llego a dar los 3:35 no voy a competir más aunque me ofrezcan Diamond League. Me iré a la altura para prepararme hasta Tokio”.